Esta tarde, mientras escuchaba música, me vino uno de esos instantes de inspiracion, de el salio el segundo capitulo de Andres y Claudia. Que lo disfruten.
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¡Que hermosos! Si... Andres tenia unos ojos preciosos, los recuerdo perfectamente: Grandes, Azules, redondos y muy muy abiertos, como si quisiera que no se le escapase un solo detalle de cada segundo de su vida.
Sí, me enamore de Andres nada mas ver sus ojos. Desde ese mismo instante, desde que nuestras miradas se cruzaron por primera vez, lo único que deseaba era que llegara la Hora, aquella hora en la que cada mañana tomaba el tren camino al trabajo, único momento del día en que podía verlo. Siempre allí, sentado en el asiento de enfrente, leyendo alguna novela desconocida o simplemente contemplando el a la gente.
Nunca me podre perdonar el hecho de no haber tenido el valor suficiente para poder haberle contado mis verdaderos sentimiento, era una extraña, una desconocida. Lo que me ocurría de verdad es que tenia miedo al rechazo, a que me rompiera aun mas mi dolorido corazón. Creía que nunca llegaría a comprender lo que de verdad sentía por el, lo amaba, lo amaba con todo mi ser.
Siempre me consolaba pensando que "Si fuera mas guapa y un poco mas lista, hubiera tenido el valor de cruzar el vagón y preguntarle quien era."
martes, 28 de abril de 2009
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Una dulce historia, pero siempre se debe buscar la forma o para no crearse esos flechazos imposibles e imaginarios o para ser valiente y cruzar los mares si hace falta.
ResponderEliminarUn abrazo
ACASO SE ACERCA A ESTE CONCEPTO EL SUSTENTADO POR LAS ESCUELAS WALDORF
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